Por Jaguar Negro
En política, como se dice coloquialmente, todo se sabe.
Ha llegado a la “Cueva del Jaguar” información desde Tulum que nos revela que, así como el alcalde, Diego Castañón, le ofreció algo así como aportarle sus quincenas al exgobernador Mario Villanueva Madrid, algo que el ex mandatario salió a desvelar y, de paso criticó con suma dureza la práctica para cooptarlo, nos comentan que un familiar directo de la senadora Marybel Villegas Canché se apersona a la oficialía mayor de Tulum, siempre después de cada quincena; así también el exalcalde de Solidaridad, Mauricio Góngora, entre otras figuras que el alcalde, ahora pintado de guinda, ha adoptado como parte de su “staff” y círculo político.
Castañón, apadrinadado por Ricardo Monreal y el senador Eduardo Ramírez, al parecer no dejará al desamparo a la senadora del mismo grupo, que busca afanosamente ser candidata por Cancún y no encuentra por dónde: por primera vez se mantuvo unos años en un mismo partido: no se quiso salir de la 4T después de pasar por el PRD, PAN, PRD y hasta el desaparecido Nueva Alianza.
¿Quién dijo que todo está perdido?
Por otro lado, supimos que dos de los políticos de Quintana Roo que se mantuvieron firmes con el “carnal” Marcelo Ebrard (en política es un gesto noble, desde donde se mire) ayer asistieron a la reunión-conferencia que ofreció la que la ex “corcholata” para dar a conocer los pasos a seguir.
“Si somos la segunda fuerza de Morena, debemos ser tratados como iguales”, dijo ayer Ebrard, por lo que, al parecer, logrará ubicar a sus incondicionales (que al final, siempre son los menos) en espacios para el próximo proceso electoral.
Ahí estuvieron firmes el diputado Ricardo Velazco, de amplia trayectoria en Morena y Julián Ricalde, también diputado.
Como dice una canción de Fito Paez: ¿Quién dijo que todo está perdido? Segundo aire siempre hay.